Una propuesta para el reconocimiento y certificación de las microcredenciales

Miguel Ángel Tamayo Taype

CIEES
1. Introducción

Una microcredencial es un reconocimiento formal que valida que una persona ha adquirido una competencia específica en un corto periodo de tiempo. A diferencia de los títulos universitarios, que suelen tener una duración más extensa y un enfoque general, las microcredenciales se centran en habilidades concretas, directamente aplicables en contextos laborales reales.

En un sentido más amplio, las microcredenciales pueden entenderse como instrumentos educativos flexibles, capaces de certificar logros de aprendizaje estructurados y evaluados. Estas credenciales pueden derivar de trayectorias formales, no formales o informales, lo que las convierte en herramientas esenciales para promover el aprendizaje a lo largo de la vida.

El crecimiento en el interés por las microcredenciales obedece a factores sociales, tecnológicos, económicos y educativos, consolidándose como una tendencia creciente en América Latina. Esta expansión responde, entre otras causas, a la limitada capacidad de las economías para generar empleo formal para egresados de programas tradicionales de educación superior, a la escasa pertinencia de muchos de estos programas frente a las necesidades del aparato productivo, y a la preferencia cada vez mayor de los empleadores por personas que demuestren poseer competencias prácticas, más allá de sus títulos académicos.

El principio de aprendizaje continuo es un eje rector de los sistemas educativos contemporáneos. En ese marco, las microcredenciales emergen como mecanismos clave para construir trayectorias educativas modulares, flexibles y adaptadas a las necesidades de las personas, la sociedad y el mercado laboral.

Para que estas credenciales adquieran un valor real y sean reconocidas a nivel nacional, es fundamental que estén respaldadas por marcos normativos que garanticen su calidad, portabilidad entre instituciones y articulación con el Sistema Nacional de Educación Superior (SNES). Su vinculación con instrumentos como el Marco Nacional de Cualificaciones de la Educación Superior (MNCES), el Sistema Nacional de Competencias Laborales (SNCL) y el Sistema de Evaluación y Acreditación de la Educación Superior (SEAES) resulta esencial para su legitimidad, utilidad y sostenibilidad.

Este documento presenta una propuesta para el reconocimiento y certificación de las microcredenciales en México, sustentada en la legislación nacional vigente y en las tendencias internacionales más relevantes.

2. Hacia un marco de confianza para las Microcredenciales

Para que las microcredenciales alcancen su potencial transformador, es necesario avanzar hacia la construcción de un marco regulatorio que les otorgue legitimidad, coherencia y sostenibilidad. Regular no implica limitar su diversidad, sino asegurar que quienes opten por esta vía de formación encuentren en ella una herramienta confiable, reconocida y de alto valor educativo y laboral.

Los pilares fundamentales de este marco de confianza son los siguientes:

  1. Calidad del aprendizaje
  2. Cada microcredencial debe reflejar un aprendizaje significativo, estructurado y verificable. Establecer criterios de calidad, mecanismos de evaluación y procesos de certificación, idealmente sustentados en modelos de certificación específicos, permitirá consolidar su valor ante empleadores, instituciones educativas y beneficiarios.

  3. Empleabilidad y movilidad laboral
  4. Dadas sus características, las microcredenciales deben diseñarse en función de las necesidades del sector productivo. De este modo, pueden cerrar brechas de habilidades, fomentar trayectorias profesionales adaptativas y aumentar la movilidad laboral dentro y entre sectores.

  5. Articulación con el sistema educativo
  6. Integrar las microcredenciales al MNCES permitiría construir trayectorias educativas progresivas, flexibles y acumulativas, capaces de convertirse en vías complementarias o alternativas para la obtención de títulos de mayor alcance y reconocimiento. Esta necesidad subraya la urgencia de desarrollar un MNCES basado en competencias verificables y orientado al aprendizaje a lo largo de la vida.

  7. Equidad y acceso inclusivo
  8. Como instrumentos democratizadores, las microcredenciales deben diseñarse bajo principios de equidad, diversidad e inclusión. Es imprescindible garantizar su accesibilidad económica, tecnológica y cultural, especialmente para poblaciones históricamente excluidas del Sistema Educativo Nacional y del mercado laboral formal.

CIEES
3. Propuesta de certificación a partir de competencias laborales

Las microcredenciales también pueden entenderse como la expresión formal de un conjunto de competencias laborales requeridas para una función productiva específica. Desde esta perspectiva, su certificación puede apoyarse en el modelo de competencias que actualmente opera el CONOCER en México.

  1. Antecedentes institucionales: el PMETYC
  2. En México, una experiencia relevante en este sentido fue el Proyecto de Modernización de la Educación Técnica y la Capacitación (PMETYC), surgido en 1994 tras la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Este programa, impulsado con financiamiento del Banco Mundial (400 millones de dólares) y del BID (150 millones de dólares), derivó en la creación del Sistema Nacional de Competencias y, posteriormente, del organismo CONOCER.

    Este modelo representa el antecedente directo de las microcredenciales, ya que su lógica parte de la evaluación de competencias laborales en contextos productivos reales.

  3. Empleabilidad y movilidad laboral
  4. Dado que una microcredencial representa la acreditación formal de un conjunto específico y verificable de competencias adquiridas en contextos formales, no formales o informales, y que estas microcredenciales pueden estar alineadas con una o varios Estándares de Competencia Laboral (ECL) se propone que el proceso de evaluación y certificación de competencias actualmente operado por el CONOCER a través de su Red de Prestadores de Servicios pueda ser adoptado como el mecanismo formal de validación de microcredenciales.

    En consecuencia, se recomienda que el diseño y la emisión de microcredenciales, especialmente aquellas orientadas a la empleabilidad y el desarrollo profesional, se construyan a partir de normas del catálogo del CONOCER o mediante la creación de nuevos Estándares de Competencia Laboral , ECL, para garantizar su articulación con el Sistema Nacional de Competencias y su certificación formal .Este enfoque permitiría:

    • Vincular las microcredenciales a estándares nacionales de desempeño laboral, garantizando su calidad, pertinencia y reconocimiento en los sectores productivos, educativos y sociales.
    • Asegurar la trazabilidad y validez oficial de las microcredenciales mediante el uso del certificado de competencia laboral emitido por el CONOCER, respaldado por la SEP.
    • Facilitar la interoperabilidad entre los sistemas de microcredenciales y el Registro Nacional de Personas con Competencias Certificadas.
    • Promover la movilidad y empleabilidad de los individuos, al permitir que sus microcredenciales representen logros tangibles reconocidos en el mercado laboral.
  5. Evaluación y Certificación de las Microcredenciales a través de la red del CONOCER
  6. La evaluación de competencias laborales se realiza mediante Centros de Evaluación debidamente constituidos y registrados ante el CONOCER. El reconocimiento formal de dichas competencias se lleva a cabo con base en los resultados obtenidos en procesos estandarizados de evaluación y es validado por los Organismos Certificadores, también integrantes de la red CONOCER.

    Este proceso, probado y consolidado, puede extenderse para validar microcredenciales, facilitando así su incorporación al Sistema Educativo Nacional y al mercado laboral de manera reconocida, eficiente y confiable.

  7. Otros aspectos normativos vigentes :
  8. El CONOCER está facultado para otorgar certificados de competencia laboral de acuerdo con las Reglas Generales y Criterios para la Integración y Operación del Sistema Nacional de Competencias, publicadas originalmente en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 11 de enero de 2007. Estas reglas han sido objeto de modificaciones sucesivas, con el fin de actualizar y fortalecer el Sistema Nacional de Competencias. Una de las reformas más recientes fue publicada en el DOF el 30 de agosto de 2024.

    Dichas reglas constituyen el marco normativo que regula la creación, operación y evaluación de los estándares de competencia laboral, así como los procesos de certificación de personas y la acreditación de las entidades evaluadoras.

    CIEES

    Asimismo, el Reglamento Interior de la Secretaría de Educación Pública (SEP), en su artículo 37, fracción I, otorga la facultad a la Secretaría para acreditar y certificar conocimientos, habilidades, capacidades y destrezas adquiridas a través del Sistema Educativo Nacional. También la faculta para expedir constancias, certificados, diplomas, títulos o grados, en coordinación con sus unidades administrativas, otras dependencias federales y autoridades educativas locales.

    Esta disposición fundamenta legalmente junto con otras ( Art. 83 de la Ley General de Educación ) el valor del certificado emitido por el CONOCER, al posibilitar su reconocimiento académico y, por tanto, su equivalencia con microcredenciales susceptibles de ser capitalizadas mediante créditos educativos. Lo anterior de conformidad con el Capítulo III del Acuerdo 286, publicado en el DOF el 30 de octubre del 2000, el cual establece los lineamientos para la evaluación y acreditación de saberes adquiridos fuera del sistema escolarizado.

    En conjunto, estos instrumentos normativos permiten avanzar hacia un modelo de Aprendizaje a lo Largo de la Vida y contribuir al fortalecimiento del Marco Nacional de Cualificaciones, facilitando la movilidad y el reconocimiento de saberes en los ámbitos educativo, laboral y social.

4. Rol estratégico de los CIEES en el desarrollo de microcredenciales

Los Comités Interinstitucionales para la Evaluación de la Educación Superior (CIEES) pueden desempeñar un papel decisivo en la consolidación de microcredenciales como instrumentos confiables y de calidad dentro del Sistema Nacional de Educación Superior. Su experiencia en evaluación puede respaldar el desarrollo, reconocimiento y articulación de estas nuevas formas de certificación.

Líneas clave de actuación:

  1. Garantizar la calidad formativa
  2. Definir criterios claros y específicos para evaluar los programas que otorgan microcredenciales, asegurando que respondan a estándares nacionales, a las necesidades del entorno laboral y a una estructura curricular pertinente.

  3. Incorporarlas en la evaluación institucional
  4. Incluir el análisis de microcredenciales como parte integral de las evaluaciones institucionales y de programas. Esto permitirá valorar su impacto real en la innovación curricular, la empleabilidad de los egresados y la mejora del aprendizaje.

  5. Impulsar modelos de mejora continua
  6. Ofrecer lineamientos y herramientas que orienten a las IES en el diseño de microcredenciales de calidad, con resultados de aprendizaje bien definidos y trayectorias formativas que se articulen con otros niveles educativos y ocupacionales.

  7. Conectar con el MNCES y el CONOCER
  8. Fomentar la vinculación de las microcredenciales con el Marco Nacional de Cualificaciones de la Educación Superior (MNCES) y con los estándares de competencia del CONOCER. Esto les otorga un valor dual: como respaldo académico y como reconocimiento laboral con validez oficial.

5. Conclusión

El reconocimiento y la certificación de las microcredenciales representa una oportunidad histórica para modernizar la educación superior en México, ampliar las oportunidades de aprendizaje a lo largo de la vida y promover la empleabilidad con base en competencias reales.

Su articulación con el modelo del CONOCER y su validación a través de los Centros de Evaluación permiten construir un sistema sólido, viable y confiable de reconocimiento de aprendizajes significativos. Asimismo, la participación de los CIEES garantizará que estas credenciales se integren con criterios de calidad al ecosistema educativo nacional, fortaleciendo su pertinencia, inclusión y legitimidad.

Finalmente, la vinculación con el Marco Nacional de Cualificaciones de la Educación Superior (MNCES) permitirá que estas microcredenciales se reconozcan, acumulen y articulen con trayectorias educativas formales, sentando las bases para un modelo nacional de aprendizaje permanente centrado en las personas.

La experiencia acumulada por México en el desarrollo de Estándares de Competencia Laboral (ECL), los instrumentos de evaluación asociados y la metodología para la construcción de cursos basados en competencias está plenamente disponible. Cabe destacar que la inversión histórica para el desarrollo de este modelo, incluyendo sus pruebas piloto, fue cercana a los 800 millones de dólares.